7 de Mayo, canonización del P. Fundador

7 mayo 2024

En este mismo día de 1950 Antonio María Claret fue canonizado por la Iglesia. La Basílica de San Pedro estaba repleta de peregrinos. A las 8 y media de la mañana empezó el rito de la canonización y la Eucaristía presididos por el Papa Pío XII. El momento más crucial y emocionante fue cuando el Papa pronunció su fallo magisterial y definitivo: «El Beato Antonio María Claret, Obispo y Confesor, decretamos y definimos que es SANTO y lo inscribimos en el catálogo de los santos».

El Papa Pío XII describió muy bien al nuevo santo: «Alma grande, nacida como para ensamblar contrastes; pudo ser humilde de origen y glorioso a los ojos del mundo; pequeño de cuerpo, pero de espíritu gigante; de apariencia modesta, pero capacísimo de imponer respeto incluso a los grandes de la tierra; fuerte de carácter, pero con la suave dulzura de quien sabe el freno de la austeridad y de la penitencia; siempre en la presencia de Dios aun en medio de su prodigiosa actividad exterior; calumniado y admirado, festejado y perseguido. Y entre tantas maravillas, como luz suave que todo lo ilumina, su devoción a la Madre de Dios»

Podemos celebrar esta fecha como una explícita invitación para vivir hoy, a ejemplo del P. Fundador, nuestra propia vocación misionera en santidad.

En estos días se está distribuyendo el texto María Antonia París amiga y compañera de camino.