Consagradas para la misión

2 febrero 2022

Hoy celebramos nuestro ser consagradas, renovamos los votos  de pobreza, obediencia, castidad y deseamos comprometernos con fuerza nueva, en el contexto de la llamada sinodal, para caminar en la escucha, en el discernimiento y en la libertad de construir puentes de comunión y avivar el sentido de pertenencia a la misión universal.

Unidas a todos los consagrados y consagradas seguimos la luz de Cristo para continuar iluminando con humildad y creatividad la historia: “regalo y desafío”.

En estos días se está distribuyendo el texto María Antonia París amiga y compañera de camino.