Gracias

1 marzo 2021

Ayer 28 de febrero, cuando la liturgia cuaresmal nos invitaba a contemplar la luz de Jesús Transfigurado, que se proyectaba consoladora, sobre la vida de tantos cristianos, llegó la noticia que sacudió nuestros corazones: el paso a la eternidad del P. Ricardo Aparicio, cmf.

¡Qué decir! ¡Si sabemos que es nuestro camino! … nos hubiera respondido él mismo, “para esto también vinimos” … Aunque no podemos negar el dolor de la partida de quien, tan fuertemente, ha marcado el camino de tantas personas, comunidades, Iglesia local.

La vida de muchas hermanas claretianas “guarda”, atesora algo de la sabiduría evangélica del “padrecito” como cariñosamente lo llamaba la gente. El P. Ricardo fue uno de los misioneros que recibieron a las primeras claretianas al llegar a Jujuy, y fue, por años, maestro y compañero de tantas otras en el ‘arte de la evangelización’ en la Prelatura de Humahuaca.

Un GRACIAS parece escaso ante tanto bien recibido… pero seguramente nos diría ¿para qué más? Ahora calle y observe porque en el silencio atento es como se perciben mejor las cosas, el movimiento de los corazones que se escapa primero por los ojos, antes que por las palabras.

¡Adiós, Padre Ricardo! hermano, maestro, amigo… Que tu pedagogía evangelizadora de mirada larga, hecha de paciencia, respeto, cariño sincero y defensa del honor de los pobres, siga siendo un modo de acercar las palabras y gestos de Jesús a cuantos con ansias esperan el mensaje liberador del Evangelio. 

Ana Maria Mandrile, claretiana

En estos días se está distribuyendo el texto María Antonia París amiga y compañera de camino.